Economía de la Información

Economía de la Información #

El Principio de Rivalidad #

Se acuerdan de la historia en que Jesús multiplica los panes?

Es como magia de un mundo utópico, no? Bueno, pues la verdad es que no es un mundo tan lejano.

En economía existe el concepto de Rivalidad, que significa que; si yo tengo tres manzanas y te doy una a ti, entonces me quedo con dos. Dicho de otra manera, al darte algo, me veo obligado a perder un poco de lo que tengo.

Bueno, y así es como hemos conocido siempre el mundo, pero la verdad es que el principio de Rivalidad solo se aplica a ciertos ámbitos del mundo, como el material.

La economía de la información se emancipa del principio de Rivalidad. Yo no pierdo nada al compartirte una idea, un chisme, una poesía, una noticia o un aprendizaje que haya obtenido a partir de una experiencia. Bueno, pierdo un poco de saliva y tiempo, pero el costo es muy marginal, y lo que resulta es una duplicación del bien, en este caso, intangible, que es el conocimiento. Si se trata no de dos personas comunicándose, sino de una charla en un auditorio con un público, el conocimiento se puede multiplicar por miles de copias (a cada persona que recibe la información) con un costo extremadamente bajo por persona.

Y asimismo ocurre en el ámbito informático o digital. Copiarte un archivo en un disco, pendrive, o enviártelo por correo, prácticamente no me cuesta nada. Entonces tú puedes obtener todo el beneficio de tener el archivo (un libro, una canción, un vídeo o un programa) con un costo cercano a cero.

Es por eso (y por otras cosas que veremos más adelante), que las leyes de la economía de los intercambios de bienes tangibles quedan obsoletas cuando hablamos de economía de la información, aunque existan intereses de grandes empresas monopólicas de disimular este fenómeno, y lucrar con el intercambio de información bajo las mismas leyes de la economía material.

=continuará=